dormir bien en la tercera edad en Residencia Matacas

Dormir bien en la tercera edad. La experiencia de Resindencia Matacàs

En Residencia Matacàs damos mucha importancia a las horas de sueño de las personas. Nos pasamos dormidos un tercio de nuestras vidas. Sin embargo, cuando llegamos a la última etapa de estas el sueño cambia y se producen alteraciones que si no se controlan pueden afectar al desarrollo diario de la vida cotidiana y afectar gravemente a nuestra salud.

Los cambios que el envejecimiento provoca en nuestros organismos también alteran la manera en que dormimos cada noche. Nos cuesta conciliar el sueño cuando nos metemos en la cama y nos despertamos demasiado. Así mismo, el sueño se fragmenta, ya que se reduce el porcentaje de este que denominamos profundo, por lo que es más fácil despertarse a mitad de la noche y más difícil volver a dormirse. Y a todo esto se le deben sumar las molestias que pueden ocasionarles las enfermedades crónicas que algunas personas mayores sufren o los efectos de los medicamentos que toman para tratarlas.

No obstante, las alteraciones del sueño no están motivadas simplemente por el deterioro físico y cognitivo de la vejez, también influye en gran medida el modo de vida que las personas mayores llevan. Es muy común la tendencia al sedentarismo durante la vejez, que provocará que la persona no consiga conciliar el sueño porque simplemente no están cansados y sus mentes están activas. En Residencia Matacàs, tenemos en cuenta los factores anteriormente mencionados, por ello, creemos que el ejercicio físico es increíblemente beneficioso para conseguir un correcto desarrollo del sueño.

Las consecuencias de dormir mal o de una mala calidad del sueño pueden ser varias. Algunos pueden parecer momentáneos, como la irritabilidad o los cambios de humor. Sin embargo, la falta de descanso puede provocar una fatiga diaria y malestar general que sumada a el resto de condiciones que pueda padecer la persona, se harán cada vez más insoportables. También disminuyen las capacidades de concentración, nuestros reflejos y la dificultad en realizar ciertos movimientos, lo cual propicia exponencialmente las caídas, tan peligrosas durante la tercera edad. Otras consecuencias son la tensión muscular, los dolores de cabeza y un rendimiento cognitivo mucho menor.

La mala calidad del sueño es como una bola que se va haciendo cada vez más grande. Si las personas mayores han dormido mal por la noche tendrán tendencia a echarse pequeñas siestas durante el día porque no están descansados. De modo que a la noche les volverá a costar dormirse y, así, vuelta a empezar.

 

Consejos de Residencia Matacàs para mejorar el sueño

Residencia Matacàs enumera una serie de consejos y pautas, que ayudarán tanto para las personas mayores como para los jóvenes, a evitar o reducir los problemas del insomnio.

  • Levantarse y acostarse todos los días a la misma hora creará una rutina que permitirá que el organismo pueda comenzar los procesos que desembocan en el sueño con suficiente antelación.
  • Un ambiente tranquilo, silencioso y relajado, con poca luz y una temperatura agradable favorece la conciliación del sueño y que este no se interrumpa, lo cual es especialmente importante para las personas de edad avanzada ya que tienen un sueño mucho más ligero.
  • Cenar ligero y controlar lo que se come para que durante la noche el estómago no nos moleste. También reducir el consumo de líquidos cuando se acerca la noche, ya que pueden provocar un estímulo diurético durante la noche.

Desde Residencia Matacàs, alertamos de la inconveniencia de las pastillas para dormir en la población de avanzada edad. Puede que sean una solución efectiva al insomnio, pero en personas mayores esta debería ser la última vía para tratar estos problemas. Las personas mayores ya consumen de media una gran cantidad de medicamentos, por lo que añadir más aún no será en ningún caso beneficioso.

Cabe destacar que en centro residencial para personas mayores de Matacàs, en Sant Adrià del Besòs, este es un asunto prioritario, pues, como se ha analizado, el sueño es un asunto que no es baladí en la tercera edad.

A modo de conclusión,  cualquier estrategia para prevenir el insomnio se aplica a esta última etapa en las vidas de las personas, pero las consecuencias de este son mucho peores. Por tanto, es crucial que las residencias presten especial atención a las horas de sueño de sus residentes y les planeen hábitos que les permitan que sus horas de descanso sean óptimas evitando a toda costa el sedentarismo en los centros y manteniéndolos activos.

Cómo dormir bien en la tercera edad (extraconfidencial.com)

Leave a Reply